Minutos finales, minutos fatales

Bordolino buscaba mejorar la imagen que había dejado en la 1era fecha cuando luego de estar en ventaja frente a Sarlanga, sufrió un empate de esos que tocan el orgullo. Por su lado AC Buitres venía motivado tras la gran victoria sobre Topos en la jornada inaugural. Un equipo de la A contra uno recién ascendido a la D. Pero como en el fútbol no hay nada escrito, el partido se desarrollaría en contra de la lógica.

El Secundario 1 fue el escenario del encuentro que mostró a ACB sin suplentes y los de blanco y negro con 2 jugadores en el banco. El arranque del primer tiempo ofreció un Buitre con más ganas de ganarlo. Los “alados” salieron con más voluntad a llevarse la victoria, aunque no establecían un claro dominio territorial. Bordolino esperaba en su campo, mientras su rival hacía control del balón de su lado y pelotazo para su único delantero, que se mostró muy activo y complicó a la defensa rival.

Sin embargo, la redonda no entiende de merecimientos, y tras sufrir 4 pelotas en los palos en su propio arco en los primeros 13 minutos, Bordolino a través del N°7 marcó el 1-0 tras un contra ataque bien jugado. Dos minutos después, Agus Lema marcó el empate transitorio, tras dominar un pase al borde del área y definir con complicidad del arquero, que no pudo sacarla en la línea. Los últimos 5 minutos de la etapa mostraron una leve reacción del Bordo que empezó a manejar mejor la pelota.

La segunda mitad del partido sería emocionante. El control seguía siendo de Bordolino, que buscaba la victoria, pero la defensa buitre funcionaba correctamente y el equipo se mantenía bien ordenado, sin resignar el ataque. Otra vez el capricho se haría presente, porque después de una buena presión en la salida de Bordolino, un lateral a favor de éste último fue jugado al arquero, que olvidó la nueva regla y tomó el balón con sus manos; resultado tiro libre indirecto a favor de ACB al borde del área: toque y gol de Maxi de Mingo, para el 1-2, con poca suerte del arquero que quiso despejar el rebote y se le fue para adentro.

A falta de 5 minutos, una patada directo a la rodilla fue castigada con amarilla para el jugador de Bordolino y la misma tarjeta para el #14 de ACB por putear tras recibir el foul, y azul por ser su segunda amarilla. Injusticias del reglamente que castiga igual al que pega que al que insulta por esa falta, obligó a que los alados terminen con uno menos ya que no tenían sustituciones. Bordolino se fue al ataque con todo y con un jugador más, pudo concretar todo lo que hasta ese momento no había podido: 2 goles y varias situaciones, en sólo 5 minutos en los que ACB no podía más que intentar aguantar. Un resultado que pareció injusto por el desarrollo, al que le quedaba bien un empate.

Maxi

Agradecemos a la Araña por su colaboracion con la edicion fotografica